domingo, 6 de noviembre de 2016

Servir a algún interés de poder (económico, político, literario, mediático, corporativo-institucional, de influencias-peloteos, etc), jamás de los jamases es luchar de verdad por la ética.  Será luchar por otra cosa, pero nunca por la ética; serán esfuerzos para otra cosa, pero nunca esfuerzos para la ética.  Así es, irrebatible e infinitamente así.

No hay comentarios:

Publicar un comentario